“Mi mayor satisfacción es saber que los
jesuitas tenemos un modo de ser y hacer, el cual podemos compartir en
cualquier lugar con otros jesuitas y laicos”, concluye Yovanny Bermúdez,
cuando se le pregunta por qué ser jesuita.
Yovanny Bermúdez nació en Maracaibo
(Venezuela), en el hogar de Roberto y La Eneida y tiene una hermana
mayor; sabe escuchar, es observador, risueño y sincero. Su vocación
nació en el encuentro cercano con la gente, pues en ella ve el reflejo
de Dios. Su camino en el servicio sigue avanzando ya que el próximo 8 de
diciembre en ceremonia presidida por Monseñor Rubén Salazar, recibirá
su Ordenación como Diácono, en la Parroquia de San Javier en Bogotá.
Se define como una persona en constante
búsqueda de las mejores formas de hacer posible relaciones más humanas y
fraternas. Piensa que el ser sacerdote le ha significado vivir
jugándose la vida en lo cotidiano por quienes necesitan ser reconocidos y
amados como hijos de Dios.
Estudió en el Colegio Gonzaga, en
Maracaibo (Venezuela), por ello desde niño conoció y escuchó hablar
sobre la Compañía de Jesús. “La historia de San Luis Gonzaga me impactó
mucho por su decisión de salir y buscar lo que fue moviendo su vida y
los jesuitas de esa época me educaron en la fe y en la acción. Las
religiosas, las maestras y profesores me enseñaron el compromiso y la
necesidad de ser mejores seres humanos” asegura el Escolar Yovanny.
Estudio Derecho pero sintió que no era
su camino y tuvo la oportunidad de trabajar con el Servicio Jesuita a
Refugiados-Venezuela, donde además de conocer, de primera mano, las
historias de vida, guerra y abandono que se viven en la frontera
colombo-venezolana, descubrió también el modo sencillo en el que Dios le
mostró cómo ayudar a tener esperanza.
Ya en la Compañía de Jesús, estudió
Filosofía en el Instituto de Teología para Religiosos (ITER) de la
Universidad Católica Andrés Bello, en Venezuela, y Teología en la
Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá. Durante su Teologado
realizado actualmente en el CIF-San Francisco Javier, ha tenido la
experiencia de encontrarse con jesuitas de otras provincias, lo que ha
enriquecido su mirada sobre la Iglesia y la Compañía.
“Mi mayor satisfacción es saber que los
jesuitas tenemos un modo de ser y hacer, el cual podemos compartir en
cualquier lugar con otros jesuitas y laicos”, concluye Yovanny Bermúdez,
cuando se le pregunta por qué ser jesuita.
Por Luz Mery Cortés León, Coordinadora de Comunicaciones de la Fundación Amar y Servir
Publicado en Noticias de la Provincia de Colombi

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